Antes de las últimas lluvias, que dejaron los potreros sin piso y obligaron a frenar el proceso de trilla, el avance en la recolección de trigo comenzó a mostrar mejores resultados en el centro norte santafesino.
El reporte del Sistema de Estimaciones Agrícolas (SEA), indicó este miércoles que el clima permitió las labores «durante dos días» en la última semana, particularmente sobre lotes sembrados tempranamente. «Luego, las precipitaciones impidieron su desarrollo, el que se paralizó. La actividad se retomaría cuando las características de los pisos, lo posibiliten», explicó el informe.
Las últimas mediciones, indican que los rendimientos promedio mínimos oscilaron entre 12 a 14 qq/ha y los máximos de 30 a 34 qq/ha, con valores puntuales de 40 qq/ha. Una semana atrás, seguían siendo -aunque «incipientes»- iguales a los de informes previos: de 12 a 15 qq/ha, un nivel que refleja los problemas climáticos que sufrió el cereal, particularmente la falta de lluvias y olas de calor intenso en el período de llenado de grano.
El SEA indicó que, a medida que progresó el ciclo de la campaña fina, se evaluaron los potenciales rendimientos y se definieron los destinos de cada lote en particular. Tal como se había reportado anteriormente, «nuevamente se observó el movimiento de maquinarias para el corte/picado/embolsado del cereal», en cuadros en estado fenológico 7 (grano lechoso avanzado) y 8 «grano pastoso», particularmente en zonas del centro santafesino donde predominan los establecimientos lecheros que utilizan reservas forrajeras.
El director técnico del SEA, edafólogo Rubén Walter, comentó a Campolitoral que los primeros lotes cosechados en General Obligado fueron aquellos que se «arrebataron» en la primera quincena de octubre por altas temperaturas. Luego, la trilla avanzó hacia el centro sur de ese departamento, mientras que la semana pasada se sumaron los primeros lotes en 9 de Julio y Vera. «Seguramente, de acuerdo a las condiciones climáticas, si no hay nuevas lluvias, se estarán sumando otros departamentos como el norte de San Justo, Las Colonias y parte de San Cristóbal», precisó.
Recién entonces, dijo, «tendremos un panorama mucho más detallado, por zonas, de los rindes que se van registrando». Por el momento, en General Obligado «está tendiendo rendimientos promedio superiores entre 5 y 8qq/ha respecto del Oeste (9 de Julio); expresando la diferencia de humedad que hubo entre ambas zonas».
Más puntualmente sobre el centro provincial, el ingeniero agrónomo Raúl López, director técnico del semillero multiplicador de Molino Matilde, refirió que los rindes en la zona serán buenos en función de las contingencias que sufrió el cultivo. «Los trigos se hicieron con el agua que había en el suelo; de la lluvia de 150 a 200 mm, que se produjeron en Marzo, Abril y Mayo», señaló. De todos modos, indicó: «en la zona va a haber trigos de más de 30 quintales; lo tenemos probado; va a haber de 10, pero la mayoría de los productores van a hacer un promedio de 24 o 25 quintales». Al respecto, evaluó: «me parece que para el año que tuvieron, con el agua que hubo, me va a ser un buen número».
López también comentó que «hay mucho trigo sembrado en la zona», a causa de problemas como la chicharrita, que restó mucha superficie al maíz. «Esa superficie la ganó el trigo y obviamente la va a ganar la soja, ahora en breve».
En cuanto a la situación de los productores, dijo que los números no eran buenos al inicio de la campaña, pero luego cambiaron por la baja en el precio de los fertilizantes y una mejora en la cotización del cereal. «Hoy los números no son del todo buenos, pero le va a quedar un peso en el bolsillo al productor», estimó.
