En el cierre del congreso de ACSOJA, participaron los máximos referentes de la industria aceitera y hablaron en el último panel sobre el ocaso de la producción de soja y de la industrialización que son la mayor fuente de ingreso de dólares del país. Además, remarcaron las oportunidades que se pierden mientras los demás competidores crecen.
En ese sentido, dejaron claro que «el estancamiento que padece el crecimiento de la soja desde hace 10 años es igual al estancamiento económico de Argentina». Situación que se visibiliza más aún si se mira lo que pasa en Estados Unidos y Brasil donde no perdieron tiempo incentivando permanentemente la producción, industrialización y exportación del complejo sojero: ninguno cobra derechos de exportación, poseen un solo tipo de cambio, otorgan libertad para operar y tienen programas de biodiesel renovable donde todos compiten. Y allí dejaron un mensaje claro «no hay más tiempo que perder ni segundas oportunidades, el cambio de políticas tiene que ser ahora».
Un ejemplo concreto que hicieron referencia, fue el dato publicado hace pocos días por la Bolsa de Comercio de Rosario en el que se señala que por primera vez en 26 años, Brasil desplaza a Argentina del primer lugar en las exportaciones de harina de soja y el marcado avance que muestra Estados Unidos en relación al HVO (nuevo biodiesel renovable) y que va a deteriorar los precios y volúmenes de venta de harina y aceite argentino en los próximos años.
«Este fuerte estancamiento es insostenible, el próximo gobierno debe dar igualdad de condiciones tributarias a la soja en relación con los otros granos, basta de maltratar a la soja que es la única industria que puede traer dólares rápidamente al país. La agroindustria tiene hoy una capacidad ociosa superior al 60% y una perdida de valor fenomenal. En Argentina se dejo de invertir hace años, mientras que en Brasil y Estado Unidos hay una marea de inversiones en molienda, acopio y producción incluyendo biodiesel».
«Necesitamos que Argentina, y sabemos que las nuevas autoridades electas en Santa Fe son conscientes, realice políticas públicas pro-exportadoras para llegar a muchos más países con productos procesados derivados de la soja. Hay que abrir mercados y dar condiciones de competencia en Argentina» coincidieron los referentes de las empresas agroexportadoras que compiten entre ellos para comprar los granos e industrializar para exportar. Y agregaron que «es imprescindible liberar la producción y exportación de las intervenciones estatales nocivas. La receta para crecer es con mercados transparentes y libres».
En el panel, que fue moderado por Luis Zubizarreta, directivo de ACSOJA y de CIARA y CEC, participaron: Roberto Urquia -AGD-, Juan Jose Blanchard -LDC-, Pablo Noceda -MOA-, Alfonso Romero -COFCO-, Pablo Scarafoni -Cargill- y Julian Echazarreta -ACA-.
La logística también fue foco de análisis de la agroexportación. Al abordar esa temática volvieron a hacer hincapié en la importancia de la Hidrovia. Y remarcaron la necesidad de tener una licitación transparente y con un pliego que apunte a un calado de salida en el mediano plazo de 40 pies; el riesgo tiene que ser empresario y sin subsidios con esquemas de peajes y donde el estado sea el contralor de este sistema. Este pedido que es algo de toda la cadena agroindustrial de Argentina tiene que estar acompañado por un serio estudio de impacto ambiental convalidado por universidades prestigiosas en conjunto.
En materia de ferrocarril destacaron la necesidad potenciarlo y poder contar con un esquema open Access; facilitar el uso de bitrenes y camiones escalables con mas y mejores rutas y accesos carreteros a las terminales que luego de 50 años sin inversión se requiere avanzar en el plan que diseñó la Bolsa de Comercio de Rosario con obras austeras y escalables en etapas fácilmente financiables con esquemas de fideicomisos atendiendo a la convivencia puerto /ciudad.
Cerraron hablando sobre la oportunidad que tiene nuestro país en materia de biocombustibles. «La necesidad de transición energética en un mundo en donde el cambio climático genera enorme preocupación, la electromovilidad no es la solución para los países en desarrollo, sino el uso de energías renovables basadas en la biomasa como es la soja y el maíz» adelantaron e hicieron referencia a los modelos de Brasil, EE.UU. e incluso indonesia en donde los cortes de biodiesel van creciendo en porcentaje y permiten un esquema de provisión en competencia, no como en Argentina que la discrecionalidad de la ley actual de biocombustibles monta un esquema discriminador a las empresas mas competitivas y encarece su valor al consumidor.
El mensaje final y en el que coincidieron todos los participantes del congreso de ACSOJA fue que «no hay más tiempo que perder ni segundas oportunidades, el cambio de políticas tiene que ser ahora».